Los líderes se van desarrollando a lo largo del tiempo. Pasan años gestionando, creando, visualizando, delegando, siendo pioneros para culminar en un completo líder. Teniendo siempre margen de mejora. La pregunta es ¿cómo puedes desarrollar tus habilidades de liderazgo?
Abrir los canales de comunicación
Con el objetivo de conocernos a nosotros mismo como líderes, es bueno conocer la opinión de los demás. La forma más fácil de conseguir esto es simplemente preguntando.
Un cuestionario 360º, un mail, una reunión, hay varias maneras, lo importante es abrir estos canales de comunicación y hacer saber a la gente que quieres conocer su opinión respecto a ti.
Ten en cuenta que quizás algunos empleados no se sienten cómodos compartiendo sus percepciones, ya que teóricamente podrías utilizar esta información en su contra. Por lo tanto, es importante crear un canal abierto y honesto donde las personas se puedan encontrar cómodas hablando de este tema.
Una manera de lograr esto puede ser con reuniones semanales, en el que los empleados tengan la opción de reunirse contigo. Así, verán que eres cercano y estás disponible para ellos. Olvida la relación tradicional de distancia profesional, esto hará que tu equipo se aleje más de ti. Es vital que tu equipo te conozca no solo en el trabajo, vete a comer con ellos, por ejemplo.
Apóyalos
A menudo los líderes pueden encontrarse bloqueados en sus propias oficinas buscando nuevas ideas, tácticas y estrategias. Esto significa estar ocupado la mayor parte del tiempo. Sabemos que ser líder toma mucho tiempo, pero una manera de mejorar tu liderazgo es abrir esa vía de comunicación para ayudar a los demás. Ya sea ofreciendo tu ayuda con algo que esté parado o a un responsable de tu equipo que parezca estresado.
Estos pequeños detalles cuentan. La gente se acordará de tu generosidad a pesar de tener la agenda tan apretada. Serás visto como un integrante del equipo, alguien que se implica y trabaja para el objetivo común.
Aprende a escuchar
Ser alguien que escucha es vital para desarrollar tu liderazgo. La gente quiere ser escuchada. Mientras tú puedes pensar que son problemas menores, para otros pueden ser una gran preocupación.
Escucha a tus empleados y escúchate a ti mismo, así demostrarás que eres empático y que te preocupas por los demás. Todos los líderes pueden oír, pero son los grandes líderes los que saben escuchar.
Deja que tu equipo aprenda por ellos mismos
Las personas admiran a los líderes, y por buenas razones. La gente respeta a los líderes por su perseverancia, tenacidad e impulso. Esto a menudo significa que las personas acuden a los líderes para resolver problemas.
No está mal, es bueno preguntar y buscar respuestas. Pero llega un momento en el que un líder tiene que permitir que su equipo busque las soluciones por ellos mismos.
Si siempre ofreces la solución correcta a tu equipo, a la larga ellos no pensarán en encontrarla y esto llevará a problemas en el futuro.
Aprender de otros
A veces solo tienes que escuchar a los que nos están guiando hacia el futuro. ¿Y cómo lo consigues sin conocer o tener acceso a líderes? ¡Muy fácil! Asiste a eventos, cursos y conferencias de líderes sobre gestión de equipos, su pasado, retos, etc.
Todos ganan cuando un líder mejora.